Discipulado 1 - Tercera Seccion: Fundamentos de la vida Cristiana
Lecciòn 20 - La Palabra de Dios.
Objetivo:
Ayudar al discípulo a obtener un panorama general de las Escrituras y cómo sacar el mayor provecho de ellas.
Introducción:
La Biblia es la Palabra inspirada por Dios, la revelación divina para el hombre, y la regla infalible de fe y conducta. En todo lugar donde se lee, se predica y se obedecen los preceptos bíblicos, se ha observado, no solamente la transformación de individuos, sino de naciones enteras.
Cómo está formada la Biblia
La Biblia está formada por 66 libros. Fueron escritos por unos 40 escritores distintos, en un período de 1600 años. Cada libro se divide en capítulos, y cada capítulo, en versículos. Estas divisiones nos ayudan a entenderla y estudiarla sistemáticamente, por la forma en que está ordenado el contenido, y a encontrar una porción de una manera más fácil.
El Antiguo Testamento.
Originalmente escrito en Hebreo y, partes, en Arameo.
Se compone de 39 libros y se divide en 5 partes:
La ley o Pentateuco: De Génesis a Deuteronomio.
Libros Históricos: De Josué a Ester.
Libros Poéticos: De Job a Cantar de los Cantares.
Profetas Mayores: De Isaías a Daniel.
Profetas Menores: De Oseas a Malaquías.
El Nuevo Testamento.
Originalmente escrito en Griego.
Sus 27 libros se dividen en 5 grupos:
Biográficos: De Mateo a Juan.
Histórico: El libro de los Hechos de los Apóstoles.
Epístolas de Pablo: De Romanos a Filemón.
Epístolas Generales: De Hebreos a Judas.
Profecía: El libro de Apocalipsis.
¿Qué hace la Biblia en nuestra vida?
- La Biblia nos alimenta espiritualmente. “2desead, como niños recién nacidos, la leche espiritual no adulterada, para que por ella crezcáis para salvación,” (1° Pedro 2:2).
- La Biblia nos guía en la vida diaria. “105Lámpara es a mis pies tu palabra, y lumbrera a mi camino.” (Salmos 119:105).
- La Biblia nos protege del pecado. “11En mi corazón he guardado tus dichos, para no pecar contra ti.” (Salmos 119:11).
- La Biblia nos ayuda a crecer en la vida cristiana. “16Toda la Escritura es inspirada por Dios, y útil para enseñar, para redargüir, para corregir, para instruir en justicia, 17a fin de que el hombre de Dios sea perfecto, enteramente preparado para toda buena obra.” (2° Timoteo 3:16 y 17)
PARA DIALOGAR: En su opinión, ¿Qué ha hecho la Palabra de Dios en su vida durante este tiempo de su experiencia cristiana?
Hay 5 cosas que hacer:
- Escucharla. “3Bienaventurado el que lee, y los que oyen las palabras de esta profecía, y guardan las cosas en ella escritas; porque el tiempo está cerca.” (Apocalipsis 1:3). Hay varias maneras de escuchar la Palabra de Dios: Asistir a las reuniones de la Iglesia (como cuerpo), oír programas cristianos por radio, escuchar predicaciones grabadas, u otras actividades semejantes.
- Leerla. “18Y cuando se siente sobre el trono de su reino, entonces escribirá para sí en un libro una copia de esta ley, del original que está al cuidado de los sacerdotes levitas; 19y lo tendrá consigo, y leerá en él todos los días de su vida, para que aprenda a temer a Jehová su Dios, para guardar todas las palabras de esta ley y estos estatutos, para ponerlos por obra;” (Deuteronomio 17:18 y 19). El cristiano debe formarse el hábito de la lectura bíblica diaria. Tal vez la mejor manera sería leer uno o varios capítulos de un libro de la Biblia cada día hasta terminar con ese libro, y recién entonces, comenzar con otro.
- Escudriñarla. “39Escudriñad las Escrituras; porque a vosotros os parece que en ellas tenéis la vida eterna; y ellas son las que dan testimonio de mí;” (S. Juan 5:39) “11Y éstos eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las Escrituras para ver si estas cosas eran así.” (Hechos 17:11) Varias formas sencillas nos pueden ayudar a aprender mejor el contenido del libro de la Biblia que estemos leyendo. Se puede anotar los nombres de las personas mencionadas, o subrayar los versículos que le llaman la atención en forma especial. Aquí hay algunas preguntas básicas que un cristiano se puede hacer al estudiar la Biblia:
- ¿Hay algún pecado que abandonar?
- ¿Hay promesas que puedo reclamar?
- ¿Hay ejemplos que seguir?
- ¿Hay advertencias que considerar?
- Vivirla o practicarla. “22Pero sed hacedores de la palabra, y no tan solamente oidores, engañándoos a vosotros mismos. 23Porque si alguno es oidor de la palabra pero no hacedor de ella, éste es semejante al hombre que considera en un espejo su rostro natural. 24Porque él se considera a sí mismo, y se va, y luego olvida cómo era. 25Mas el que mira atentamente en la perfecta ley, la de la libertad, y persevera en ella, no siendo oidor olvidadizo, sino hacedor de la obra, éste será bienaventurado en lo que hace.” (Santiago 1:22-25) “24Cualquiera, pues, que me oye estas palabras, y las hace, le compararé a un hombre prudente, que edificó su casa sobre la roca. 25Descendió lluvia, y vinieron ríos, y soplaron vientos, y golpearon contra aquella casa; y no cayó, porque estaba fundada sobre la roca.” (S. Mateo 7:24 y 25). Esto es lo más importante que puede hacer un cristiano. No se trata de memorizar un sinnúmero de pasajes bíblicos, o que leamos el libro sagrado de tapa a tapa, sino más bien se trata de poner en práctica cada mandamiento que descubrimos en nuestro estudio de la Palabra de Dios.
- Proclamarla. “46Hablaré de tus testimonios delante de los reyes, y no me avergonzaré;” (Salmos 119:46) “15Y les dijo: Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura.” (S. Marcos 16:15). El apóstol Pablo estaba muy consciente de este compromiso de proclamar el mensaje. Él dijo: “1Por lo demás, hermanos, orad por nosotros, para que la palabra del Señor corra y sea glorificada, así como lo fue entre vosotros,” (2° Tesalonicenses 3:1).
PARA HACER DURANTE LA SEMANA: En un cuaderno, anote en orden todos los nombres de los 66 libros de la Biblia según las divisiones correspondientes dadas en este estudio.
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